Me dedico ayudar a madres hispanas que tienen bebés o niños con desórdenes en su alimentación y/o lenguaje, que quieren estar informadas para sentirse más seguras y sin estrés ante los retos que enfrenten sus hij@s.
Para ayudar a las madres, utilizo estrategias únicas basadas en una metodología propia que he ido integrando en base a una sólida formación en alimentación y lenguaje, con resultados probados en cientos de familias durante 20 años de experiencia.
Con mi acompañamiento, tú puedes poner en práctica acciones que sí funcionan, para que tu hijo coma o hable en corto tiempo. Además, podrás recuperar tu confianza, estar más segura y contribuir con la felicidad de tu hogar.
Contacte a Danilka cuando Felicia tenía 18 meses, porque no hablaba ni comía nada. Desde el primer día me dijo que hacer, con explicaciones claras, fáciles de entender y aplicar. Feli empezó a hablar cada día más, y a comer más variado. Ya Feli tiene 4 años y cada vez que necesito un consejo La llamo y ella me apoya. Sus consejos son lo que uno necesita.
Busque a Danilka por recomendación. Fui a una cita con Fer y me dijeron que era Autismo, fue el peor día de mi vida. Sin embargo, ella me dijo que empezáramos a trabajar. Al cabo de solo unos meses el cambio fue impresionante. Ella es muy profesional, te ayuda a entender que pasa, es muy empática ante las situaciones. Ahora Fer esta muy adaptado, come de todo y avanza en su colegio. y ya no hablaron mas de autismo…”
Mi hijo tiene autismo, y lo que más le costaba era hablar. Ella primero me entrenó para saber como hacerlo. Me enviaba las tareas y nos reuníamos para ver los avances. Yo Trabajo duro con él, pongo en práctica todo lo que Danilka me dice. Hemos logrado que ahora ya habla, canta, va al karate, asiste a su escuela y cada día Avanza más. Las orientaciones de Danilka siguen siendo muy asertivas , cada vez que la contacto. Fue la ayuda que más me sirvió cuando no sabía por donde empezar. Hoy en día sigue siendo un apoyo real para mí.
Cuando Danilka vio a Elisa por primera vez, tenía 4 meses. Mi hija tenía la lengua grande. Ella nos ayudó desde el primer día. Elisa avanzo en su alimentación con rapidez, pudo ubicar su lengua en su lugar y ya al año y medio empezó hablar. Trabaje con Danilka por casi 2 años. Pienso que su ayuda fue clave para que ella mejorara tanto.
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